De todos los langostinos conocidos en el planeta de
los terrícolas,el de Vinaroz es,con toda justicia, el más valorado.De aspecto atigrado, lo reconoceremos por el tono azul-violeta de la cola.
Para degustarlo, nada mejor que hacerlo a la plancha: sartén de fondo recio o plancha, fuego a tope y cuando humee añadiremos los langostinos,
el aceite y la sal(en este orden).Un minuto y medio
demasiado quedarán secos y con la piel pegada a la
carne.Se comen con los dedos(de la mano,je) y
añadirles limón es un sacrilegio (aunque,como dijo
un torero,hay gente pa to).